Piero Cipollone, un miembro de la Junta Ejecutiva del Banco Central Europeo (ECB), enfatizó la importancia de adoptar un euro digital como una medida para contrarrestar los riesgos que plantean las monedas estables. Hablando en la reunión del Grupo Euro50 el 18 de octubre, Cipollone argumentó que el dinero emitido por el banco central, incluida una moneda digital euro, puede crear un buffer soberano europeo contra la creciente influencia de las monedas estables emitidas privadamente, que conllevan amenazas potenciales a la estabilidad financiera y a la política monetaria efectiva.
Riesgos que presentan las monedas estables
Cipollone destacó que a medida que los mercados de monedas estables se expanden, también lo hacen los peligros asociados con su uso generalizado. Estos riesgos incluyen la inestabilidad financiera debido a posibles escenarios de desvinculación, la volatilidad causada por flujos de arbitraje y la posibilidad de que la adopción generalizada de monedas estables podría retirar depósitos de los bancos, lo que podría afectar a los mercados de crédito. En este contexto, el euro digital y otras monedas digitales del Banco Central se consideran herramientas críticas para mitigar estas vulnerabilidades.
Promoviendo la Soberanía y la Innovación
El ejecutivo del BCE explicó que un euro digital reduciría la dependencia de Europa de proveedores externos y apoyaría soluciones de pago innovadoras y paneuropeas tanto para consumidores como para comerciantes. Al anclar los pagos digitales a una moneda soberana, Europa puede posicionarse para competir con monedas estables y mantener el control sobre los sistemas de pago minorista nacionales.
Contexto Global y Imperativos Estratégicos
Con los volúmenes de transacciones de moneda estable y las capitalizaciones de mercado en aumento, los bancos centrales de Europa, China y Rusia están cada vez más posicionados como la última línea de defensa contra la expansión global de las monedas estables respaldadas por el dólar. En EE. UU., la administración del ex presidente Trump apoyó explícitamente el crecimiento de las monedas estables a través de la Orden Ejecutiva 14178, destinada a fortalecer el liderazgo estadounidense en tecnologías financieras digitales mientras se fomenta el uso legítimo de monedas estables respaldadas por el dólar en todo el mundo.
Los analistas sugieren que el BCE puede necesitar acelerar el despliegue de su moneda digital y las iniciativas relacionadas para mantener el control de la política monetaria, ya que la afluencia de dinero privado basado en el dólar podría socavar la soberanía financiera europea.
Mirando hacia adelante
A medida que la adopción de monedas estables a nivel global continúa en aumento, el BCE enfrenta presión para actuar rápidamente. Emitir alternativas digitales soberanas puede volverse crítico para preservar el control sobre el marco monetario de Europa y prevenir que las monedas estables privadas dominen los sistemas de pago minorista y transfronterizos.
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El BCE posiciona el euro digital frente a las stablecoins en medio de una intensificación de la batalla monetaria
Piero Cipollone, un miembro de la Junta Ejecutiva del Banco Central Europeo (ECB), enfatizó la importancia de adoptar un euro digital como una medida para contrarrestar los riesgos que plantean las monedas estables. Hablando en la reunión del Grupo Euro50 el 18 de octubre, Cipollone argumentó que el dinero emitido por el banco central, incluida una moneda digital euro, puede crear un buffer soberano europeo contra la creciente influencia de las monedas estables emitidas privadamente, que conllevan amenazas potenciales a la estabilidad financiera y a la política monetaria efectiva.
Riesgos que presentan las monedas estables
Cipollone destacó que a medida que los mercados de monedas estables se expanden, también lo hacen los peligros asociados con su uso generalizado. Estos riesgos incluyen la inestabilidad financiera debido a posibles escenarios de desvinculación, la volatilidad causada por flujos de arbitraje y la posibilidad de que la adopción generalizada de monedas estables podría retirar depósitos de los bancos, lo que podría afectar a los mercados de crédito. En este contexto, el euro digital y otras monedas digitales del Banco Central se consideran herramientas críticas para mitigar estas vulnerabilidades.
Promoviendo la Soberanía y la Innovación
El ejecutivo del BCE explicó que un euro digital reduciría la dependencia de Europa de proveedores externos y apoyaría soluciones de pago innovadoras y paneuropeas tanto para consumidores como para comerciantes. Al anclar los pagos digitales a una moneda soberana, Europa puede posicionarse para competir con monedas estables y mantener el control sobre los sistemas de pago minorista nacionales.
Contexto Global y Imperativos Estratégicos
Con los volúmenes de transacciones de moneda estable y las capitalizaciones de mercado en aumento, los bancos centrales de Europa, China y Rusia están cada vez más posicionados como la última línea de defensa contra la expansión global de las monedas estables respaldadas por el dólar. En EE. UU., la administración del ex presidente Trump apoyó explícitamente el crecimiento de las monedas estables a través de la Orden Ejecutiva 14178, destinada a fortalecer el liderazgo estadounidense en tecnologías financieras digitales mientras se fomenta el uso legítimo de monedas estables respaldadas por el dólar en todo el mundo.
Los analistas sugieren que el BCE puede necesitar acelerar el despliegue de su moneda digital y las iniciativas relacionadas para mantener el control de la política monetaria, ya que la afluencia de dinero privado basado en el dólar podría socavar la soberanía financiera europea.
Mirando hacia adelante
A medida que la adopción de monedas estables a nivel global continúa en aumento, el BCE enfrenta presión para actuar rápidamente. Emitir alternativas digitales soberanas puede volverse crítico para preservar el control sobre el marco monetario de Europa y prevenir que las monedas estables privadas dominen los sistemas de pago minorista y transfronterizos.