El repunte de las criptomonedas durante la primera parte de la jornada del lunes se evaporó en el transcurso de la jornada. La presión de venta finalmente permitió que los osos se impusieran durante el primer día de la semana. Este desenlace bajista se impuso en gran parte tras conocerse los datos negativos en el sector de ETF al contado de la criptomoneda en la bolsa de valores estadounidense.

Durante la primera jornada de esta semana, los ETF que brindan exposición a BTC experimentaron flujos de salida dominantes. Según datos de una plataforma de análisis, de estos productos salieron $40.4 millones, con lo que alcanzan cuatro jornadas consecutivas de números rojos en términos de flujos.

Estos retiros de los capitales de estos fondos estuvieron comandados por el producto de BlackRock, IBIT. Este ETF de la criptomoneda pionera, el más importante del mercado, lleva una racha de 5 jornadas seguidas de dumping en las que se totalizan $439.7 millones en salidas.

Solamente este viernes, este fondo registró salidas de $100.7 millones, con las que opacó el intento de recuperación del sector ETF de BTC.

Este desempeño negativo se reflejó en el precio de Bitcoin, el cual pierde terreno nuevamente. A pesar de esta presión de venta, la más importante de las criptomonedas se mantiene relativamente cerca de los $110.000 por moneda.

Los ETF de Bitcoin alcanzaron este lunes la cuarta jornada seguida con flujos negativos dominantes. Fuente: Farside

El Bitcoin lucha contra la presión externa

La razón de esta nueva caída del BTC está asociada estrechamente con el ambiente geopolítico y comercial. Este lunes, se conoció que Estados Unidos y Australia firmaron un acuerdo comercial de $2 mil millones en materia de tierras raras. Este acuerdo se convierte en un serio desafío al dominio de China sobre este mercado.

De hecho, las tierras raras son actualmente una de las cartas más sólidas de Pekín para confrontar la presión comercial de Donald Trump. El país asiático control una gigantesca porción del comercio y producción global de estos elementos. Además, la tecnología que poseen para separarlos (pesados y ligeros) es prácticamente exclusiva de la nación comunista.

Sin embargo, esta nueva tentativa de Washington de crear una alternativa con ayuda de Australia se convierte en un serio desafío para China. Para los inversores, este nuevo episodio se convierte en una señal negativa, dado que garantiza mayores tensiones entre Pekín y la Casa Blanca.

En el caso de Bitcoin, el precio del token nuevamente retrocedió tras conocerse el desarrollo de este nuevo acontecimiento. La gravedad del asunto reside en el hecho de que si China pierde esta carta en su confrontación con Washington, podría recurrir a otras mucho más delicadas. Entre ellas se cuenta una escalada directa en contra de las grandes tecnológicas que operan en su territorio.