El IPC de la eurozona de agosto está generando bastante ruido hoy. Se prevé un aumento del índice general al 2,1% interanual. El subyacente podría bajar al 2,2%. Curioso.
En el BCE, halcones y palomas no se ponen de acuerdo. Unos creen que no hay que bajar más los tipos. Otros temen no alcanzar los objetivos de inflación. División total.
Los datos de hoy quizás no cambien mucho las expectativas. El mercado sigue apostando por un recorte en el segundo trimestre del año que viene. Raro, considerando el estímulo fiscal alemán previsto.
El EUR/USD se mantiene cerca de 1,1700. Cómodo ahí. Las posiciones largas son un riesgo, pero los datos de empleo de EE.UU. podrían dar un empujón. Parece que seguirá entre 1,1650-1,1750 por ahora.
La atención se centra en los próximos datos económicos y señales del BCE. Los inversores están al acecho. Cualquier sorpresa podría mover el euro. Veremos qué pasa.
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El IPC de la eurozona de agosto está generando bastante ruido hoy. Se prevé un aumento del índice general al 2,1% interanual. El subyacente podría bajar al 2,2%. Curioso.
En el BCE, halcones y palomas no se ponen de acuerdo. Unos creen que no hay que bajar más los tipos. Otros temen no alcanzar los objetivos de inflación. División total.
Los datos de hoy quizás no cambien mucho las expectativas. El mercado sigue apostando por un recorte en el segundo trimestre del año que viene. Raro, considerando el estímulo fiscal alemán previsto.
El EUR/USD se mantiene cerca de 1,1700. Cómodo ahí. Las posiciones largas son un riesgo, pero los datos de empleo de EE.UU. podrían dar un empujón. Parece que seguirá entre 1,1650-1,1750 por ahora.
La atención se centra en los próximos datos económicos y señales del BCE. Los inversores están al acecho. Cualquier sorpresa podría mover el euro. Veremos qué pasa.