Por qué mantengo un optimismo cauteloso sobre las acciones de Alibaba

Puntos clave

• La nube + IA está ganando impulso.
• Alibaba está probando chips de IA de fabricación propia.
• El sentimiento del mercado hacia las acciones de Alibaba está cambiando.

El gigante chino del comercio electrónico ha puesto a prueba la paciencia de los inversores durante los últimos años. Desde represiones regulatorias hasta la desaceleración del gasto de los consumidores y la intensificación de la competencia de rivales nacionales, la empresa pasó de ser el campeón tecnológico indiscutible de China a convertirse en una acción que muchos inversores abandonaron.

Sin embargo, los últimos resultados sugieren motivos para volverse más optimistas. Aunque persisten los riesgos, Alibaba muestra señales tempranas de progreso estratégico en áreas cruciales para el largo plazo. Estas son tres razones por las que los inversores deberían darle otra oportunidad.

1. La nube y la IA impulsan un crecimiento real

Durante años, Alibaba Cloud fue una decepción. A pesar de ser líder del mercado en China, el crecimiento se desaceleró y las ganancias seguían siendo esquivas. Esa narrativa está comenzando a cambiar.

En su trimestre de junio de 2025, Alibaba reportó un aumento del 26% en los ingresos de la nube, alcanzando los 33.400 millones de RMB (4.700 millones de dólares), superando significativamente el crecimiento general de ingresos del 10%. Más revelador aún, la dirección reveló que los ingresos relacionados con la inteligencia artificial crecieron a tasas de tres dígitos por octavo trimestre consecutivo, representando ya más del 20% de los ingresos externos de Alibaba Cloud.

No es solo una recuperación, sino un cambio estructural. Las cargas de trabajo de IA son mucho más intensivas en cómputo que el alojamiento tradicional, lo que significa mayores ingresos por cliente, mejores márgenes y relaciones más estables. Con su modelo de lenguaje Tongyi Qianwen y herramientas empresariales impulsadas por IA, Alibaba ya no es solo un proveedor de infraestructura en la nube, sino que se está convirtiendo en una plataforma de IA.

2. Construyendo resiliencia estratégica con chips nacionales

Otro motivo de optimismo es la inversión de Alibaba en diseño de semiconductores. Los informes indican que la empresa está probando su propio chip de inferencia de IA, un paso crucial para reducir la dependencia de tecnología estadounidense en medio de restricciones a la exportación.

Alibaba no pretende reemplazar a los líderes globales en chips para entrenar modelos a gran escala. Pero la inferencia —ejecutar modelos de IA en aplicaciones del mundo real— es donde ocurre gran parte del uso y la monetización. Al desarrollar sus propios chips de inferencia, Alibaba se protege contra riesgos en la cadena de suministro y asegura poder escalar servicios de IA sin estar completamente a merced de tensiones geopolíticas.

Me parece que esta estrategia protege la capacidad de Alibaba para comercializar IA en todos sus negocios, desde computación en la nube hasta comercio electrónico y logística. Y aunque actualmente no hay planes de ofrecer estos chips a clientes externos, nada impide que esto cambie en el futuro, abriendo una nueva fuente potencial de ingresos.

3. Señales alentadoras de un cambio de sentimiento

Finalmente, el sentimiento parece estar lentamente girando a favor de Alibaba. Tras los últimos resultados, varias firmas de análisis aumentaron sus objetivos de precio o reiteraron calificaciones de compra, señalando el crecimiento de la nube y la adopción de IA como catalizadores clave.

Las mejoras de los analistas no garantizan una recuperación sin problemas. De hecho, Alibaba tiene mucho más que hacer para recuperar la confianza de los inversores a largo plazo, como volver al crecimiento sostenible en su negocio de comercio electrónico y reducir las pérdidas de sus otras empresas.

Pero cuando Wall Street comienza a revalorar una acción después de años de negatividad, a menudo señala un cambio en cómo los inversores ven el potencial futuro de la empresa. Las acciones de Alibaba cotizan actualmente a un ratio precio-ventas de apenas 2,4 veces, una fracción de su valoración máxima de 15,5 veces, ofreciendo protección a la baja y oportunidad de crecimiento.

Lo que significa para los inversores

Alibaba está lejos de estar libre de riesgos. La competencia en comercio electrónico sigue siendo feroz y el panorama macroeconómico de China sigue siendo incierto.

Pero debajo del ruido, Alibaba muestra señales alentadoras: su negocio en la nube está ganando impulso gracias a la IA, está construyendo resiliencia estratégica con el desarrollo de chips nacionales, y el sentimiento finalmente está comenzando a descongelarse.

Para inversores con visión de largo plazo, esa combinación podría ser la razón más clara en años para ser cautelosamente optimistas sobre mantener acciones de Alibaba.