El gigante de la IA de San Francisco, Anthropic, ha tomado cartas en el asunto al bloquear a todas las empresas de propiedad china y sus sucursales internacionales del acceso a sus servicios de chatbot Claude. Me parece interesante cómo justifican este movimiento bajo el lema de “proteger la seguridad nacional de EE. UU.” y prevenir que gobiernos autoritarios malinterpreten su tecnología.
Construyendo sobre las restricciones anteriores contra Rusia, Irán y Corea del Norte, Anthropic ahora apunta a cualquier organización con más del 50% de propiedad vinculada a estas regiones, independientemente de dónde estén registradas u operen. ¿Su razonamiento? Estas entidades podrían explotar lagunas para adquirir IA avanzada con fines militares o de inteligencia.
La postura de la empresa es intransigente: una subsidiaria de propiedad china en Europa o América del Norte no puede reclamar independencia de su empresa matriz porque sigue sujeta a la legislación china. Esto crea un camino directo para que la presión autoritaria acceda a información o tecnología sensible.
Lo que me llama particularmente la atención es el enfoque proactivo del CEO de Anthropic, Dario Amodei. En lugar de esperar a los mandatos del gobierno, está presionando activamente por controles más estrictos sobre las transferencias de IA a China. Nombra específicamente a empresas como DeepSeek, Alibaba, Tencent y ByteDance como preocupaciones, sugiriendo que han hecho progresos alarmantes en el desarrollo de IA que podrían potencialmente alimentar aplicaciones militares.
Esto representa un cambio significativo en la tradicional evitación de Silicon Valley hacia los enredos de política exterior. Anthropic parece estar dispuesto a sacrificar cientos de millones en ingresos potenciales para posicionarse como un líder de la industria consciente de la seguridad. Con Amazon como un importante inversor y más de 300,000 clientes comerciales a nivel mundial, esta decisión tiene un peso sustancial.
No puedo evitar preguntarme si esto se trata realmente de preocupaciones de seguridad o si está parcialmente impulsado por miedos competitivos. Después de todo, las empresas de IA chinas han estado logrando avances tecnológicos notables. De cualquier manera, Anthropic parece convencido de que proteger su tecnología y alinearse con los intereses nacionales estadounidenses supera cualquier pérdida financiera que puedan incurrir a corto plazo.
La guerra fría tecnológica sigue escalando, y Anthropic ha elegido claramente su bando.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
El Bloqueo Agresivo de IA de Anthropic Contra Empresas Chinas
El gigante de la IA de San Francisco, Anthropic, ha tomado cartas en el asunto al bloquear a todas las empresas de propiedad china y sus sucursales internacionales del acceso a sus servicios de chatbot Claude. Me parece interesante cómo justifican este movimiento bajo el lema de “proteger la seguridad nacional de EE. UU.” y prevenir que gobiernos autoritarios malinterpreten su tecnología.
Construyendo sobre las restricciones anteriores contra Rusia, Irán y Corea del Norte, Anthropic ahora apunta a cualquier organización con más del 50% de propiedad vinculada a estas regiones, independientemente de dónde estén registradas u operen. ¿Su razonamiento? Estas entidades podrían explotar lagunas para adquirir IA avanzada con fines militares o de inteligencia.
La postura de la empresa es intransigente: una subsidiaria de propiedad china en Europa o América del Norte no puede reclamar independencia de su empresa matriz porque sigue sujeta a la legislación china. Esto crea un camino directo para que la presión autoritaria acceda a información o tecnología sensible.
Lo que me llama particularmente la atención es el enfoque proactivo del CEO de Anthropic, Dario Amodei. En lugar de esperar a los mandatos del gobierno, está presionando activamente por controles más estrictos sobre las transferencias de IA a China. Nombra específicamente a empresas como DeepSeek, Alibaba, Tencent y ByteDance como preocupaciones, sugiriendo que han hecho progresos alarmantes en el desarrollo de IA que podrían potencialmente alimentar aplicaciones militares.
Esto representa un cambio significativo en la tradicional evitación de Silicon Valley hacia los enredos de política exterior. Anthropic parece estar dispuesto a sacrificar cientos de millones en ingresos potenciales para posicionarse como un líder de la industria consciente de la seguridad. Con Amazon como un importante inversor y más de 300,000 clientes comerciales a nivel mundial, esta decisión tiene un peso sustancial.
No puedo evitar preguntarme si esto se trata realmente de preocupaciones de seguridad o si está parcialmente impulsado por miedos competitivos. Después de todo, las empresas de IA chinas han estado logrando avances tecnológicos notables. De cualquier manera, Anthropic parece convencido de que proteger su tecnología y alinearse con los intereses nacionales estadounidenses supera cualquier pérdida financiera que puedan incurrir a corto plazo.
La guerra fría tecnológica sigue escalando, y Anthropic ha elegido claramente su bando.