Recientemente, un fenómeno interesante ha llamado la atención de los participantes del mercado: las declaraciones de Trump parecen estar perdiendo su influencia de antaño. Cuando él clama por aumentar los aranceles, el mercado casi no reacciona; por el contrario, cuando intenta calmar el sentimiento del mercado, provoca más pánico y dumping.
Este fenómeno parece indicar que la credibilidad de Trump en los mercados financieros está enfrentando un desafío severo. Los inversores parecen comenzar a pensar que él podría realmente tomar algunas acciones muy poco convencionales e incluso arriesgadas.
Al mirar hacia atrás, la situación era completamente diferente: cada vez que Trump mencionaba los aranceles, el mercado experimentaba una fuerte volatilidad; cada vez que elogiaba a Estados Unidos, el mercado de valores se recuperaba rápidamente. Cada vez que suavizaba su postura, el mercado volvía a subir rápidamente.
Después de varias horas de digestión, el sentimiento del mercado puede haberse estabilizado. Si esta noche ocurre una caída en cierta medida, entonces este ajuste podría estar cerca de su fin. Sin embargo, lo que más preocupa ahora es que nuestra parte podría hacer una respuesta contundente. Cualquier acción de este tipo podría desencadenar una nueva ola de agitación en el mercado.
Sin embargo, considerando la situación actual, es posible que tomemos una actitud más cautelosa. Después de todo, el efecto de este tipo de intercambios verbales ya no es el mismo que antes. Actualmente, el mercado está más enfocado en las acciones reales de Estados Unidos, en lugar de las declaraciones de Trump.
En este entorno de mercado complejo y cambiante, los inversores deben mantener la calma y centrarse en los cambios de políticas sustantivos, en lugar de dejarse llevar por las fluctuaciones de las declaraciones a corto plazo. Al mismo tiempo, también deben prestar atención a los cambios generales en la situación económica global y gestionar adecuadamente el riesgo y la asignación de activos.
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Recientemente, un fenómeno interesante ha llamado la atención de los participantes del mercado: las declaraciones de Trump parecen estar perdiendo su influencia de antaño. Cuando él clama por aumentar los aranceles, el mercado casi no reacciona; por el contrario, cuando intenta calmar el sentimiento del mercado, provoca más pánico y dumping.
Este fenómeno parece indicar que la credibilidad de Trump en los mercados financieros está enfrentando un desafío severo. Los inversores parecen comenzar a pensar que él podría realmente tomar algunas acciones muy poco convencionales e incluso arriesgadas.
Al mirar hacia atrás, la situación era completamente diferente: cada vez que Trump mencionaba los aranceles, el mercado experimentaba una fuerte volatilidad; cada vez que elogiaba a Estados Unidos, el mercado de valores se recuperaba rápidamente. Cada vez que suavizaba su postura, el mercado volvía a subir rápidamente.
Después de varias horas de digestión, el sentimiento del mercado puede haberse estabilizado. Si esta noche ocurre una caída en cierta medida, entonces este ajuste podría estar cerca de su fin. Sin embargo, lo que más preocupa ahora es que nuestra parte podría hacer una respuesta contundente. Cualquier acción de este tipo podría desencadenar una nueva ola de agitación en el mercado.
Sin embargo, considerando la situación actual, es posible que tomemos una actitud más cautelosa. Después de todo, el efecto de este tipo de intercambios verbales ya no es el mismo que antes. Actualmente, el mercado está más enfocado en las acciones reales de Estados Unidos, en lugar de las declaraciones de Trump.
En este entorno de mercado complejo y cambiante, los inversores deben mantener la calma y centrarse en los cambios de políticas sustantivos, en lugar de dejarse llevar por las fluctuaciones de las declaraciones a corto plazo. Al mismo tiempo, también deben prestar atención a los cambios generales en la situación económica global y gestionar adecuadamente el riesgo y la asignación de activos.