Perplexity AI se mete en líos legales. Britannica y Merriam-Webster los han demandado. Acusan a la startup de copiar su contenido sin permiso. Parece que la cosa va en serio.

La demanda se presentó en Nueva York. Britannica dice que Perplexity roba su material. Y no solo eso. También afirman que les quita visitas y dinero. Vaya lío.

Hay más. Acusan a Perplexity de usar mal sus marcas. Dicen que la IA da respuestas inexactas usando sus nombres. Esto confunde a la gente, según ellos.

Perplexity resume artículos directamente en sus respuestas. Britannica y Merriam-Webster no están nada contentos con esto. Creen que les "roba" tráfico.

La startup se define como una herramienta de búsqueda avanzada. Usa rastreo web en tiempo real. Suena interesante, pero no convence a todos.

No es el único problema legal de Perplexity. Otros medios también los han llevado a tribunales. Parece que están en el punto de mira.

Jeff Bezos ha invertido en Perplexity. Eso es algo. También tienen acuerdos con algunos editores. No está todo perdido.

Por cierto, la Encyclopedia Mundial de Historia lanzó un chatbot con Perplexity. Usa su base de datos académica. Curioso giro de los acontecimientos.